Acabado el curso, el silencio no ha llegado aún a las clases. La alegría de los Summer Camps se vuelve contagiosa y dan ganas a cualquiera de volverse niño de nuevo tan sólo para poder lanzarse a la carrera con bólidos robots, zambullirse en compañía de divertidos nadadores mecánicos o ponerse a los mandos de una nave espacial hechos de cartón, material reciclado y conectores electrónicos para ser los primeros en llegar a Marte.
Resulta de lo más refrescante descubrir que la diversión esta vez depende de nosotros mismos, comprobar que podemos llegar a moldear nuestros sueños con nuestras manos y nuestra mente. Sin necesidad de enchufarse, de conectarse, de aislarse. Podemos, literalmente, crear un mundo nuevo en compañía de nuestros amigos y compañeros de clase, hecho de ilusión, aventura, experimentos y mucha perseverancia. Seguir adelante hasta que uno logra lo que se propone es un maravilloso aprendizaje que fortalece nuestra mente y nos da mayor confianza en nuestras capacidades. Una auténtica lección para la vida.
Un año más -esta vez sí- abriremos de par en par los ventanales de los colegios para dejar que se aireen las aulas y las ideas. La verdad es que todos lo necesitábamos, especialmente en un año como éste. Al asomarnos, veremos también el curso que nos espera justo tras las vacaciones de verano. En muchos aspectos posiblemente nos recordará al anterior: la convivencia en grupos burbuja, los protocolos de higiene, la adecuación de los proyectos a la disponibilidad de espacios y equipos…
Con una gran diferencia: las limitaciones nos han enseñado, a cualquier edad, a extraer lo mejor de nosotros mismos, a confiar en nuestros propios recursos y a ser más conscientes, también a la hora de aprender.
Ingenieros de nuevos futuros
Cuando en IGNITE nos planteamos, desde una visión pedagógica STEAM, qué aprendizajes pueden resultar más relevantes y significativos para los jóvenes constructores de futuros, no tenemos ninguna duda que las soft skills -en especial la creatividad y la comunicación- ocupan un lugar muy especial. La tecnología nos ayuda a desarrollarlas, a aplicarlas de forma transversal, a convertir retos computacionales en auténticos circuitos de “fitness mental”, pero este modelo queda incompleto si algo tan básico como un propósito. Aunque muchos de nuestros alumnos no se convertirán en tecnólogos de mayores, prácticamente todos serán usuarios intensivos de tecnología. Su capacidad para transformar el mundo que les rodea, de crear nuevos modelos de negocio, de establecer otras reglas de juego, crecerá exponencialmente al mismo ritmo que la sociedad digital. Y como sabe cualquier superhéroe, todo poder conlleva una gran responsabilidad.
Es necesario pues, despertar la conciencia desde pequeños y ayudarles a entender que cualquier cambio, por pequeño que sea, tiene un impacto impredecible en el futuro. Es bueno acostumbrarse a pensar: ¿para que servirá lo que estoy creando? ¿será útil para todo el mundo? ¿ayudará a que el mundo sea mejor, o todo lo contrario? ¿existe una manera de hacerlo acorde con la Naturaleza?
Tecnología consciente
El compromiso de IGNITE con la educación, como organización responsable, se basa en la integración de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) promovidos por las Naciones Unidas en sus proyectos STEAM. En muchas de las narrativas y retos gamificados que hemos estado introduciendo con éxito durante el curso pasado encontraremos elementos que conciencian sobre el impacto mediambiental, como la preservación de la biodiversidad terrestre y marina, pero también nos invitan a reflexionar como arquitectos, ingenieros o tecnólogos acerca de los mejores modelos para nuestras ciudades, obtener energía de forma asequible y sostenible o asegurar el suministro de agua potable.
Todo está conectado con todo, y desde la misma manera que es imposible pasar página en una pandemia global sin estabilizar la situación sanitaria a nivel mundial, no podremos evitar el agotamiento de los recursos naturales o el calentamiento global sin plantear nuevos modelos de producción y consumo.
Desde hace varios años la comunidad educativa se encuentra totalmente alineada en la transmisión de los ODS del modo más significativo posible, un esfuerzo al que IGNITE se suma con entusiasmo, integrando sus proyectos en las estrategias educativas de los escuelas en ámbito parescolar y curricular.
Nuevos formatos en innovación educativa
Un ejemplo interesante de integración de los ODS en proyectos educativos STEAM es Health Guardians 2030, reto impulsado por la Fundación Pfizer con la colaboración de IGNITE Serious Play para sensibilizar al alumnado sobre la importancia de los ODS y, en concreto, el ODS3 dedicado a los hábitos saludables y el bienestar global. La fórmula elegida ha sido la creación de un mundo virtual inmersivo en Minecraft diseñado siguiendo una cuidada estrategia de gamificación para hibridar contenidos de divulgación científica y entretenimiento.
De este modo los participantes han adoptado un rol activo en el aprendizaje, trabajando colaborativamente en equipo y desplegando habilidades clave para su futuro como el pensamiento computacional, la resolución de problemas y el pensamiento crítico.
En esta edición, cerca de 700 alumnos y más de 150 equipos de centros educativos en España han participado en el reto aportando soluciones imaginativas y aprendiendo con la ayuda de diversos expertos de reconocido prestigio planteando sus preguntas en sesiones online.
A lo largo del curso 2020-21 destaca también, a nivel de innovación educativa, la experiencia IGNITE English. Respondiendo a la pregunta de si es posible aprender inglés desde el interior de un videojuego, estudiantes de diversos niveles de Primaria han ido mejorando su competencia lingüística y conversacional en lengua inglesa explorando y desarrollando sus creaciones en Minecraft. Resulta sorprendente comprobar cómo las propias características de estos entornos virtuales favorecen el aprendizaje de conceptos gramaticales y sintácticos en situaciones cotidianas, hipotéticas o incluso fantásticas. El trabajo colaborativo y la puesta en común de los resultados contribuye, aún más, a la consolidación del manejo del idioma.
Tras un curso tan intenso, en todos los sentidos, desde el equipo pedagógico de IGNITE seguimos extrayendo y analizando los muchos aprendizajes obtenidos para desarrollar nuevos proyectos educativos con los que esperamos sorprenderos a la vuelta de vacaciones.
Hasta entonces, ¡os deseamos un fantástico tecnoverano!